9.27.2011

Oh, el misterio. Se esconde de mi, se escapa.
Se torna invisible ante mis cautos ojos.
Oh, misterio. Ven, dejame atraparte.

Misterio... no corras más,
no quiero que seas desconocido.
No seas más misterio.

9.26.2011

Tonterías, como siempre.

Justo ahora, mientras estoy frente a la pantalla del ordenador, escribiendo, que es lo que más me gusta hacer,  me siento estúpida, indispensableinnecesaria.

No pertenezco aquí, está más claro que el agua cristalina de un manantial.
 ¿Quién me necesitaría? ¿Quién extrañaría mis bromas?
 Ah, claro, yo jamás hago bromas.

Ya no puedo reir. Ya no quiero estar aquí.
Ya. Es suficiente.

 ¿Pero cómo hacerles entender a los demás? ¿Cómo decirle a mis padres: "Se que gastaste mucho dinero en mi, que te esforzaste por mandarme a la universidad. Lo agradezco, pero no quiero continuar"?

¿Así de sencillo?
 ¿Qué ganaría?
Peor, ¿qué perdería?

9.14.2011

Crisis anial* septembrina

*Anial: Palabra referida a la crisis de Ana en el ámbito mundial, holístico, es decir, en totalidad. Blah, blah, blah. Ana + Mundial= Anial

¿Por dónde empezar? Quizá, sea en el mejor de los casos, decir que el primero de Septiembre a las doce de la mañana, pedí vía facebook "Septiembre, se bueno conmigo, por favor". Es Septiembre, mes patrio, mes de lluvia, frentes fríos, hurácanes y demás desastres naturales. El mes de la década de los atentados a las Torres Gemelas y el Péntagono. Septiembre, el mes en el que 9/11 está en todos lados. Documentales, peliculas, entrevistas, programas. Esto, lo otro, y demás.
 Oh, si, ¿porqué olvidarlo? Septiembre, mes del otoño.
Septiembre, mes en el que muchos gritan: ¡VIVA MÉXICO, CABRONES! Se hacen desayunos mexicanos, pancartas, se adornan las calles y los establecimientos. Las noches mexicanas, los antojitos, la comida tipica, música, bailes, tradiciones...
Oh, Septiembre, dulce Septiembre.
¿Qué bonito es éste mes, no?
Pero en el ámbito Anial septiembre significa: Lluvias, ganas de quedarte en casa, leer, escribir, amodorrarte en los muebles, tirarte de cabeza en la cama, prender lámparas a mitad de la madrugada, soñar, imaginar... Pensar que el tren de Hogwarts no llegó, no llegó desde hace nueve años. ¡Y la bendita carta de Pottermore tampoco llega!
Fiestas patrias, gastar el poco dinero que pensabas ahorrar para auto-regalarte libros, porque tu querida maestra quiere hacer un desayuno patrio. Que al fin y al cabo, termina siendo italiano porque a la bandera le faltó el aguila devorando la serpiente en la franja blanca.
Septiembre significa crisis existencial. ¡Cumples años, Ana! Y no has hecho nada de provecho, no has vivido aventuras, no has tenido un solo amor en tu vida, no eres NADIE. Sabes que tus amigas están planeando regalarte un pastel, pero quieres esconderte. Largarte del mundo real y viajar a los mundos fantásticos que te esperan en los libros.
¡Sí, lárgate!
Pero no puedes...
¡Y lo peor de todo! La crisis anial aumenta cuando descubres que has provocado una crisis emocional a tu computadora, le has causado la muerte. ¡Culpable, culpable, culpable! Solo tu eres culpable, debiste consentir a tu preciosa computadora, darle cariños, cuidados, quitarle el polvo... y no solo tomarla como una loca desaforada al llegar de la universidad. Que estúpida. ¿Ahora como te mantendrás en contacto con quienes te importan? ¿Ahora qué harás? ¿Qué será de tus blogs, tus historias, tus amigos online?


¿Qué será de ti?

9.10.2011

Presentando al príncipe Yhorel





Él es Yhorel.
Es el primero en sucesión a la corona de Daraídhe. 
Tiene un hermano y 
dos hermanas.
Es muy competitivo. 







Yhorel será un buen gobernante. 
Es noble, amable, leal y justo. 
Yhorel es un buen guerrero.
Aunque si le pones una bandeja de comida, 
preferirá abastecerse en vez de luchar.






Siempre tiene una sonrisa para regalar.

Es el único amigo de Narthi. 
La hace reír todo el tiempo y lo disfruta.
Incluso le dedicó la victoria en el torneo.
Y su premio por ganar fue ser el compañero 
de la princesa en su fiesta de cumpleaños.




Yhorel, Caballero de Primera Clase, Lord de las Tierras Tardías.
Yhorel, futuro rey.
Yhorel, quien debe gobernar a todo al que pueda.
Yhorel, el príncipe que debe mantener el Imperio Daraídheo, 
aunque desea ser un simple campesino. 



9.09.2011

Silencio



Se sentía frustrada, ésa era la verdad. 

Hacía algunos años pensaba que un amigo (o amiga) era toda aquella persona que le hiciera pasar un buen tiempo, que la escuchara cuando tenía algún problema, le diera un abrazo por las mañanas o simplemente que le dijera: "Soy tu amiga".  Podrían nombrarse un montón de cosas más y Ana seguiría considerándolos como amigos. Si había una traición, no importaba... porque los amigos sabían perdonar.

Cuando era San Valentín, se jalaba los cabellos, porque debía hacer más de 50 tarjetas. 
Ana tenía amigos. Muchos amigos. 
De hecho, Ana aún pensaba eso...hasta hace unos meses. 

 Podía contar sus amigos con los dedos de las manos. 
Y aun le hacían falta, así que usaba los dedos de los pies. 
Ya no eran 50, pero al menos 20 sí. 

Entonces algo cambió... Algo, dentro de ella hizo clic. Quizá fue un tornillo que se salió de su lugar. Alguna pieza que se desprendió. O peor, algún aparato dentro de ella que se descompuso. Algo sucedió. No sabe con certeza qué fue, pero el hecho es que ella ya no es como antes. Y todos los que la rodeaban lo han notado, pero ninguno se ha acercado a husmear, ninguno a tenido curiosidad, ninguna ha querido averiguar qué sucede.

Ahora Ana se siente sola, verdaderamente sola. 
Sonríe, ríe, habla, se sincera con algunos pocos... pero no hay un sentimiento de amistad.
Ana no tiene amigos. Ninguno al que pueda abrazar. 
Ana está aburrida de su monótona vida.
Ana hizo ejercicio tres días en esta semana, pero hoy se levantó pensando en que no serviría de nada.
Ser delgada no atraería más amigos, no la haría extrovertida. 
No la haría sentirse amada por quien es.

Ana se preguntó: ¿para qué cambiar?
¿Porqué yo debo cambiar?
¿Porqué los demás no pueden cambiar?
¿Porqué quienes fueron mis amigos ya no están?
¿Porqué esto, porqué lo otro?

SILENCIO.

No había respuestas. 
No había palabras. 
No había nadie que pudiera responder.

Ana estaba sola. Ana solo se tenía a ella misma.
Pero Ana no sabía la respuesta, entonces ¿cómo podría responder Ana, la compañera, si tampoco la sabía?

SILENCIO.

OTRA VEZ. 

No había quién respondiera. 

9.08.2011

Presentando a la princesa Narthi.




Ella es mi princesa. 
Se llama Narthi. 
Es la sucesora a la corona de Nuktaé.


Solo tiene un amigo pero él está lejos.
Se siente sola y triste la mayoría del tiempo.
Necesita a alguien en quien confiar. 
Pero sigue sola.



Ella es Narthi y debe emprender un largo viaje.
No puede ser una adolescente irresponsable, 
porque es la reina ahora que el Rey ha muerto.

Ella es solo una chica valiente que está rodeada de poder,
una chica que solo desea ser libre.
Una chica que quiere amar y ser amada.

Narthi, mi pequeña y hermosa Narthi.