Hey there, larchos!
Acá Ana de nuevo, viviendo la vida loca y sufriendo mal de amores jáh; además he visto una peli muy linda llamada The good lie (2014) que me ha roto el corazón, luego vendré a hablarles de ella asdjkhasldjfh. Por hoy, solo vengo a parlotear sobre libros. Ni siquiera sé si esto será alguna sección o qué, porque no lo hago con todos mis libros. Dio la casualidad que It's kind of a funny story es especial porque es el primer libro físico que leo en inglés (anteriormente leí Fangirl de Rainbow Rowell en pdf, así que no vale). Realmente es muy quotable, lindo y al mismo tiempo depresivo y llegador.
Craig cuenta su historia: está deprimido, no come, piensa en saltar del puente de Brooklyn. No sabe precisamente qué fue lo que causó su estado actual; solo sabe que se siente así, que por más que intenta mantener la comida en su estómago, no puede hacerlo y que a veces cree que la tristeza y desgana es causada por fumar marihuana; sin embargo, cuando está limpio, se da cuenta que no es eso. Estudió mucho para aprobar un examen y ser admitido en una importante escuela secundaria; cuando lo logra y empieza a tomar las clases, su nivel de estrés incrementa tanto que para cuando es momento de decir alto, ya se encuentra deprimido y desganado. La vida se convierte en una pesadilla para él; es más feliz cuando duerme que cuando está despierto. No hay un inicio concreto para su depresión.
Quizá fue por eso, por lo mucho que me identifiqué con Craig, que terminé enamorada de esta novela. Coleccioné un montón de marcapáginas verde brillante en el borde del libro y hasta dibujé caritas expresivas en ellos para recordar cómo me había sentido mientras lo devoraba. También anoté las canciones que escuché y algunas otras que sentí que eran perfectas en ciertos momentos.
Las pistas que coleccioné
ಥ⌣ಥ
ಥ⌣ಥ
- steven's solitude | stephen j anderson
- remember me as a time of day | explosions in the sky
- friends | john paesano
—(...) Quería hacer algo estúpido.
—¿Suicidarte?
—Sí.
—¿Querías suicidarte por mí?
—¡No! Solo estaba en un mal momento, y tu eras parte de el, obviamente, porque eres parte de mi vida, como Aaron y mi familia lo son, pero pensé que podrías escucharme antes de que yo...
—Craig, estoy tan halagada.
—No, lo has entendido mal. No te sientas halagada.
—¿Cómo podría no sentirme halagada? Nunca tuve a un chico que quisiera suicidarse por mí antes. Es lo más romántico.
—Nia, no era por ti.
Nia no era un personaje que me agradara demasiado, pero a partir de ese momento, juro que tuve ganas de entrar a la historia y cortarle la cabeza. Y darle un par de bofetadas a Craig por haber estado idiotizado por ella. ¡Ahora hablemos de lo que me dio justo en el corazón! En el momento en que asignan una habitación a Craig y él conoce a Muqtada, estas palabras pasan por su mente:
Así que sí, solo vine a decirles que después de varias semanas leyendo esta novela, de muchas tazas de café tomadas y algunas derramadas sobre las solapas, después de muchos marcapáginas adheridos, pensé y pensé y pensé. Después empecé a llorar y me pregunté qué tanto de lo plasmado en este libro, de toda esa sensación de ahogarte en la oscuridad, qué tanto de todo eso fue lo que Ned Vizzini sintió. Es muy triste pensar que Ned, al final de todo, se quitó la vida.
Quizá será mejor estar con alguien como él, alguien que parece peor que yo. Nunca lo consideré, pero hay personas que están peor que yo, ¿verdad? Quiero decir, realmente hay personas sin hogar y que no pueden dejar la cama y que no podrán mantener un trabajo, y en el caso de Muqtada, que tienen problemas serios con la temperatura porque sus cerebros están averiados. Comparado con ellos soy... bueno, soy un niño rico malcriado.Me sentí así muchas veces y no puedo dejar de pensar que lo tengo todo: casa, familia, trabajo, momentos divertidos, seis gatos y un perro, más un perro y un gato comunitario en el trabajo; todos los días despierto y la gente me saluda con una sonrisa en el rostro (la mayoría) y me desean bien (a menos que sean hipócritas) y... bueno, podría decir que aunque veces me siento inexplicablemente triste, soy eso, una niña malcriada que tiene una economía estable. Pero me hace falta algo y no sé qué es. Y Craig tampoco lo sabe. En muchos momentos, sentí que Craig estaba hablando por mí y sigo sin saber si eso es bueno o malo o qué rayos. Quizá lo que me incomodó un poco fue que, por arte de magia, las cosas se arreglaron de una forma muy rápida. Afortunadamente, Craig dice más tarde que no sabe cómo irán las cosas pero que tratará. Sabe ya que a veces se mejora para caer, le ha ocurrido antes y reconoce que podría ocurrirle de nuevo.
No tengo miedo de morir; tengo miendo de vivir. Tenía miedo antes, pero tengo más miedo ahora que soy elhazmerreír.
Así que sí, solo vine a decirles que después de varias semanas leyendo esta novela, de muchas tazas de café tomadas y algunas derramadas sobre las solapas, después de muchos marcapáginas adheridos, pensé y pensé y pensé. Después empecé a llorar y me pregunté qué tanto de lo plasmado en este libro, de toda esa sensación de ahogarte en la oscuridad, qué tanto de todo eso fue lo que Ned Vizzini sintió. Es muy triste pensar que Ned, al final de todo, se quitó la vida.