A veces quisiera que mi vida fuera cómo una pista de música. De esas que, de un momento a otro, te llenan de esperanza y te reconfortan, te hacen olvidar tus miedos y componen todo, aunque sea por unos solos minutos.
A veces quisiera que mi vida fuera una pista de música. Una que jamás te cansarías de escuchar. Una que repites durante toda la infinidad.
Muy bonito texto. Y suscribo tus palabras, una pista melodiosa y armónica.
ResponderEliminarBesos.