Páginas y Vida

A veces me pregunto:

Si mi vida estuviese escrita en un libro, ¿me adelantaría a leer el final?

Recuerdo a Dustfinger de la saga de Tinta (Inkworld Trilogy por Cornelia Funke), que conoció a su creador –autor del libro Corazón de Tinta- y quien, desgraciadamente, le contó su final: la muerte. ¡Sí! Murió tratando de rescatar a Gwin –una especie de hurón que es su amiguito-. Recuerdo su decepción, su depresión al saber que iba a morir…

No os preocupéis –noten mi acento españolado fingido- que no les contaré el final de Inkheart. No les diré si Dustfinger se recuperó de aquello, si murió o solo, si por mera casualidad, corre entre las praderas, grita al viento y llega a casa buscando a su mujer, esperando el maravilloso reencuentro.

Ahora hablemos de mí…

¿Qué haría si descubriera mi final? ¿Y si, al cambiar la pagina 654 –por decir un número- descubriera que estoy a punto de vivir uno de los mejores días de mi vida? ¿Qué haría, que imaginaría, cómo sería transportada por los enunciados? ¿Volaría entre esas palabras de consuelo para la presente oscuridad o simplemente esperaría a que ese momento llegase? ¿Solo soñaría con ese día pero jamás despertaría para vivirlo?

Supongo que, después de todo, no aguantaría las ganas de dar la vuelta a esa pagina y conocerme un poco más, conocer la vida y -¿porqué no?- la muerte. Pero lo que más me encantaría, sería conocer el núcleo, ya saben… ésa parte emocionante que te pone los pelos de punta, que te hace pensar solo en continuar con tu libro, en desear descubrir más –saludos Sr. Curiosidad-.

Después de eso, leería el final.

Leería y me obligaría a sonreír, porque como dice una hermosa frase de Gabriel García Márquez:

No llores porque ya se terminó, sonríe porque sucedió.

Y citando a una de mis tantas bandas favoritas, os dejo este fragmento de la canción “Tu sonrisa” por Los Claxons:

"Hoy llegó algo nuevo a mi vida
Hoy puedo escribir lo que antes no podía
Esta novela parece tener final feliz
Pero dependerá que no dejes de sonreír"

Y aprovechando, les comento que esto estuvo inspirado en la canción “Salvami” de Sonohra, “Tu sonrisa” de Los Claxons, mi amor por los libros, la curiosidad del conocer qué pasará el resto de mi vida pero sobretodo, a dónde carajos voy a ir. Porque honestamente, a mis casi dos décadas de vida, no tengo idea... e insisto en que aun, no termino de conocerme.

Solo existe una certeza: la palabra escrita es una cosa poderosa (Mo, Inkheart)

The written Word is a powerful thing.